Resumen

La fístula biliar es la complicación específica más frecuente de las resecciones hepáticas. Tienen una frecuencia de entre un 4.8 a 7.6%. Las principales series que analizan esta complicación, se refieren a pacientes con daño hepático crónico, cuya consecuencia final es la insuficiencia hepática y sepsis intrabdominal. Sin embargo en las series en que el daño hepático crónico es la excepción, la consecuencia de esta complicación no está completamente establecida. El objetivo es mostrar nuestra experiencia en el manejo y el pronóstico de esta complicación en pacientes sin daño hepático crónico, y realizar una revisión de la literatura con el fin de intentar una sistematización de manejo y pronóstico. Para el presente estudio, consideramos bilirragia o filtraciones biliares al escape de contenido bilioso a través de los drenajes a partir del primer día postoperatorio y con un volumen mayor a 50 milímetros al día, y que se mantenga a lo menos por 72 horas. En cambio, fístula biliar, es aquella bilirragia que se prolongue más allá de 10 días, con un trayecto externo establecido, independiente del volumen de bilis drenado. Entre Junio de 1991 y Junio del 2002, hemos realizado 89 resecciones hepáticas regladas en nuestro servicio. Las indicaciones más frecuentes son el cáncer vesicular y la resecciones de metástasis por cáncer colorectal. Sólo un paciente de la serie era portador de daño hepático crónico. La frecuencia de fístula biliar fue de 10% (9 pacientes). La evolución en 8 casos consistió en el cierre espontáneo entre el día 6 y 12. En el paciente restante el cierre se produjo en el día 35 del postoperatorio, con estudio de colangio endoscópico negativo para demostrar el sitio de escape biliar. Estos resultados mas los obtenidos al revisar la literatura, nos llevan a proponer una clasificación de fístula biliar posthepatectomia en 4 tipos: Tipo I, autolimitadas, con conexión a la vía biliar principal. Tipo II, sin conexión a la vía biliar principal y cierre tardio, Tipo III, secundarias a lesión de vía biliar periférica, que requiere intervención, y Tipo IV cualquiera de las anteriores complicada con ascitis e insuficiencia hepática, de alta morbimortalidad.

Palabras clave: Resecciones hepáticas hepatectomías complicaciones fístulas biliares.

2007-02-02   |   9,210 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 57 Núm.1. Enero-Febrero 2005 Pags. 45-51 Rev Chil Cir 2005; 57(1)