Las fracturas lineales de cráneo como factor de riesgo en pacientes con traumatismo craneoencefálico menor

Autores: Lezcano Ortíz Humberto Jesús, Popa Guerra Élcides, Sánchez Paneque Guillermo

Resumen

Introducción: La identificación de factores de riesgo que influyen obre el pronóstico de paciente con traumatismo craneoencefálico menor e un primer paso hacia la disminución de la morbilidad y la mortalidad por esta causa. Dentro de ellos, las fracturas de cráneo tienen una importancia práctica considerable en relación con la aparición de hematomas intracraneales postraumático en estos casos. Objetivo: Determinar y cuantificar la influencia de las fracturas lineales de cráneo en la aparición de hematomas intracraneales en paciente con traumatismo craneoencefálico menor. Paciente y Métodos: Se realizó un estudio retrospectivo de 294 pacientes ingresados por traumatismo craneoencefálico menor de de el 1ro de mayo del 2004 hasta el 30 de abril del 2005, a los cuales se les practicó exámenes de Rx simple y tomográfico de cráneo entre las 24 y las 48 horas del trauma. Se estimó, por un análisis univariado, la influencia de las fracturas de cráneo en la aparición de hematomas intracraneales yuxtadurales después de sufrir un traumatismo de este tipo. Resultados: Lo paciente que tuvieron algún tipo de fractura lineal de bóveda craneal (14.28%), tuvieron una probabilidad 38.15 veces mayor (IC 95% 10.84-147.31) de tener un hematoma intracraneal yuxtadural en comparación con lo que no presentaron esta condición (85.71%). Veinte pacientes de nuestra serie presentaron hematomas intracraneales, de ello solo cuatro (1.36%) requirieron cirugía. Conclusiones: La presencia de fractura lineal de cráneo constituye un factor de riesgo importante para la aparición de algún tipo de hematoma yuxtadural en pacientes con traumatismo menor de cráneo.

Palabras clave: Pronóstico trauma craneal traumatismos morbilidad mortalidad hematoma cirugía.

2006-07-20   |   6,826 visitas   |   2 valoraciones

Vol. 29 Núm.1. Junio 2006 Pags. Rev Chile Neuroc 2006; 29(1)